
A NIENTEEEEE!!!!!
Esa es la conclusion final a la que he llegado despues de casi un mes en Italia. Ya puede estar el hombrecito del semaforo en verde, que aqui todo conductor que se precie es daltonico o ciego porque no lo ven.
La ley de la calle es... SUICIDIOOO!! Si sales sin valor de tu casa... no te mueves de tu casa. El caso es echarle narices; que viene un coche, da igual, a cruzarrr!! Que el no se va a parar. Y menos mal que primero aterrice en Napoles y esa fue la prueba de fuego definitiva... me cure del todo. Llegar a Bari fue una gozada (que dentro de lo malo, es un paraiso de la conduccion si se toma como referencia Napoles). En fin, que aqui la seguridad vial y las normas civicas no es que sean lo mas importante.
Alucinariais si estuvierais aqui... Que si, se dice mucho y mucho mucho mas sobre el trafico en Italia (yo ya creia conocerlo), pero todo son leyendas urbanas... esto es mucho peor!!! Por fortuna, poco a poco vamos cogiendo el ritmo y ya nos parece algo normal tirarnos a la carretera para intentar cruzar de una acera a otra (y eso que solo hay un carril)... igual que nos hemos acostumbrado a que cada dia nuestro despertado sea el pitar incesante de los coches de tu calle.
Eso si, a las 2 de la madrugada es genial ir por el medio de la carretera, en la mas completa tranquilidad y armonia, sin un solo vehiculo a motor que pase por ahi, sin un solo claxon reventando tus oidos... es lo que tiene vivir en una ciudad en la que la vida nocturna es la nuestra, solo y exclusivamente...
